Dra. Areli Reséndiz Rodríguez

Es fácil perdernos en la rutina de ser mamá: la ropa para lavar que nunca acaba,  el quehacer de la casa, la comida, los trastes sucios que se acumulan, los biberones, pañales, vacunas, pediatra, la tarea de los niños,  la pareja, la familia, los suegros, el trabajo, los perros, gatos, etc, etc, etc… En fin… la lista nunca acaba y el agotamiento físico y mental se vuelve una bomba de tiempo. ¡Nadie dijo que fuera fácil! complicado sí… pero no imposible!!!

A lo largo de la historia humana se han pasado por múltiples creencias acerca de lo que DEBE SER la maternidad (según el momento cultural e histórico), pero al final de cuentas seguimos en las mismas… nadie sabe la verdad absoluta de cómo ser la mejor mamá, la mamá perfecta. 

En este artículo hablaré desde el punto de vista positivo de la crianza y cómo poder beneficiarnos al seguir ciertos hábitos que nos llevan a vivir una maternidad efectiva. 

1. CUIDA TUS PENSAMIENTOS/ CREENCIAS

La mamá perfecta NO EXISTE; así que, si tratas de serlo, vas a acabar por frustrarte todo el día, todos los días de tu vida y perderte de gozar los momentos que la maternidad te ofrece. 

El hacerlo todo perfecto es un pensamiento recurrente en nosotras que queremos darle lo mejor a nuestros hijos y creemos que si todo sale perfecto ellos no sufrirán. Pero la verdad es… que las creencias que nos impone la sociedad o pero aún, la propia familia, terminan por hacernos más daño a nosotras y por ende a nuestro niños. 

Vigila lo que piensas y de dónde viene ese pensamiento: es algo que me dicta la sociedad/mi mamá/mis suegros sobre el cómo DEBERÍA DE… o NO DEBERÍAS DE…  Si sientes que eso que piensas te hace sufrir o no te permite disfrutar a tu hijo como a ti te gustaría…entonces: PARA/DETEN esa forma de pensar, analiza y muévete hacia lo que te hace feliz, principalmente para gozar la maternidad. 

Recuerda: una mamá frustrada va a ejercer la maternidad desde el enojo, la ansiedad, regaños, etc. 

Una mamá emocionalmente saludable ejerce la maternidad desde el respeto, paciencia y comprensión. 

2. EQUILIBRA TUS ÁREAS

Checa las áreas de tu vida (familia, trabajo, hijos, escuela, amigos, pareja, salud, etc.) y ponles un porcentaje sobre cuánto tiempo le estas dedicando a cada área.  ANALIZA TUS PRIORIDADES: Especialmente en qué lugar te estas poniendo tú. 

3. JERARQUIZA

Siempre hay cosas que hacer y nos estresa pensar que todo se debe de resolver en éste instante. NO ES ASÍ.... Coloca en una lista lo que puede esperar y lo que no, posteriormente con lo que no puede esperar analiza en qué orden lo podrías realizar. 

Date cuenta si en la lista colocas tiempo que le dedicas a tus hijos, lo cual más adelante veremos que estaría dentro de las que no pueden esperar. 

4. CALMA/RESPIRA

Van a existir siempre momentos de estrés que por más organizado que tengamos todo, nos van a asacar que control. Especialmente en el caso de lo hijos solamente recuerda: LOS NIÑOS FELICES Y SALUDABLES SON INQUIETOS Y HACEN MUCHO RUIDO. Si tienes eso en casa… MUY BIEN, tienes niños felices y saludables; es decir, lo estas haciendo bien!!!

Solamente cálmate y respira cada vez que quieras explotar para gritarles por el ruido o por alguna cosa que no deberían estar haciendo. Las técnicas de crianza positiva te ayudarán a guiarlos con amor y no con gritos y regaños. Es mejor que hagan las cosas porque te respetan y quieren a porque te tengan miedo.

5. CALIDAD NO CANTIDAD

Los niños no quieren cosas materiales siempre, ellos prefieren cosas más sencillas como:

- Darle abrazos, besos y gestos de cariño cuantas veces puedas (esto también le ayudará a expresar sentimientos y emociones que son cruciales en salud mental)

- Leer con ellos 

- Ir al parque y jugar juntos

- Jugar juegos de mesa

- Celebrar logros y fechas importantes con ellos (dedica a observar y preguntar lo que es importante para ellos).

Esto va a impactar en la limitación que tengan para el uso de TV, tablets y celulares, lo cual es importante para su sano desarrollo. 

6. SE VALE PEDIR APOYO

Finalmente somos seres humanos con un nivel de tolerancia y agotamiento finito; así que, si sientes que necesitas apoyo, puedes pedirlo. Busca gente a tu alrededor en quien confíes y pídelo. No pierdes nada con hacerlo. 

Además puedes apoyarte de expertos en el tema como en la CLÍNICA BIENESTANDO donde están expertos que puedes orientarte y ayudarte en hacerte vivir la maternidad y no seguir sufriéndola. 

Son consejos simples que hay que ponerlos en práctica para que se hagan hábito y poder vivir una maternidad plena y efectiva.